jueves, 2 de enero de 2014

“Un año para olvidar”

           
            A punto de finalizar el presente año 2013, no me gustaría despedirlo sin dedicarle todo aquello que por la tan cacareada (y mal llamada crisis) habemos tenido que pasar los sufridos y sacrificados españolitos de a pié, mientras nuestros gobernantes democráticos (según nos quieren hacer tragar) solo se  han preocupado de desvalijar las arcas de nuestros recursos Nacionales, hasta el punto de llevarnos a la miseria o indigencia como la queramos llamar  en la que estamos embarcados, y sin ver esa luminosa y ansiada luz en la puerta de al final del túnel, por la cual según nuestros abnegados y preocupados defensores estamos a puntos de salir.
           
            Yo soy conciente de que sí, se trata de una crisis en la cual esta inmersa toda
la comunidad económica europea, y nosotros como pertenecientes a la misma no nos queda otra que sufrir y cargar con la parte que nos corresponda de tales consecuencias: pero también soy conciente (en mis humildes conocimientos sobre el  particular) que si nuestros políticos se hubiesen puesto todos  de acuerdo y dispuestos a trabajar sobre el tema, es más que seguro que el asunto de la (repito) tan cacareada crisis no hubiese llegado hasta el  asfixiante y caótico extremo en el que nos encontramos debido a la actuación y comportamiento de nuestros    dirigentes de turnos tan aficionados y amigos de apoderarse de los vienes ajenos, sin el menor decoro conciencia y respeto hacia nosotros los contribuyentes: y por lo tal como es natural, hemos llegado a la actual situación y claro, de ahí dimanan los males del enfermo.
           
            Si cuando se descubrió el desmán de Marbella que fue donde empezó el choriceo, continuando por Valencia, Baleares, Canarias, Madrid, Castilla la mancha, Andalucía y no sigo más por que la lista sería  interminable; a partir de ahí  comenzó a complicarse la cosa como las malas enfermedades  extendiéndose  por todo el territorio Nacional, estoy seguro que no hubiésemos llegado al desesperante y crítico momento por el que estamos pasando. Pero claro, este atajo de indeseables, chorizos y sinvergüenzas  por los que estamos gobernados, se dieron cuenta del magnífico chollo que tenían a la vista y decidieron no dejarlo escapar:  hablaron entre si y fundaron la ONG o asociación de ALIVABA Y LOS CUARENTA LADRONES (aunque estos son muchos más) y al grito de maricón el último (como decíamos nosotros de pequeños) se lanzaron todos en plancha al pillaje aprovechando las aguas revueltas para hacer su agosto; pero eso sí, sin caballos ni trabucos (para no ser confundidos con los bandoleros del pasado, a pecho descubierto,  sin ningún reparo ni pensárselo un momento antes de que fuese demasiado tarde.
           
            Por lo tanto como he mencionado anteriormente, a mí por desgracia no me pudieron dar las facilidades de estudiar que han tenido toda esta “Chusma” de indeseables que nos han llevado a la situación en que nos encontramos. Pero yo a pesar de carecer de estudios superiores (como les ocurre a un importante grupo de los políticos de pacotilla del momento)  quiero decirles a estos ladrones, salteadores de cuentas del Estado, Ayuntamientos, Ministerios, Empresas, Cajas de Ahorros bancos y demás, que el asunto de la crisis habría sido facilísimo de solucionar, pero claro, a estos chorizos sin escrúpulo no les interesaba ni les era rentable tal procedimieno.
            Por lo tanto, la crisis se hubiese evitado de la siguiente manera: incautación de todo el patrimonio (o bienes) de estas miserables ratas hasta sumar la cantidad mangada (robada) para su recuperación, más la sanción correspondiente a la cantidad sustraída  por el delito cometido y de la cárcel nada de nada,  a la calle a trabajar y poder producir para ganarse el sustento con el sudor de su frente  como el resto de los españoles, ya que allí  dentro vivirían como maharajaes y  además tener que darles de comer a estos amigos del saqueo nos costaría un ojo de la cara acostumbrados como están a vivir bien sin dar un palo al agua y comer mejor, que correría a cargo de todos nosotros los contribuyentes.
           
            Después de pasado el calentón y haberme desahogado un poco soltando todo lo que he ido almacenando durante todo el año, con mucho dolor y contra mi voluntad, no me queda otra opción  que calificar este año que termina como indica su título en el encabezamiento del presente escrito ¡¡UN AÑO PARA OLVIDAR!!
                                                       
                                                           El Abuelo.-


lunes, 25 de noviembre de 2013

Villancico   de la crisis

Zapatero y sus secuaces
ayudados  por sus gentes,
buscan recomendación
para asistir al G, veinte

Anda, anda, anda, la mari mirona,
anda, anda,anda que viene la mona.

Si  salimos  de  esta crisis,
to nos pondremos   las botas,
mientras  nos sigan votando
esta pandilla de idiotas

Anda, anda, anda, ponte ya el corpiño
anda, anda, anda que viene Pepiño.

Aunque no lo reconozcan,
soy un tipo inteligente
seguiré  mangoneando
mientras  me vote la gente

Anda, anda , anda,  amarra este sobre
date ya a la fuga que se acerca solbes.

El pueblo y demás  partidos
no hacen más que criticarnos
miestras llenemos la panza
seguiremos aguantando

Anda, anda , anda corre y guarda eso
que como nos “Jilen” nos quedamos tiesos.


Y aquí termina la historia
de este tema tan oscuro
mientras sigamos chupando
¡¡Al pueblo!!  Le den por cu…….

Anda, anda, anda , trinca y sal corriendo

Que cuando nos pillen se termina el cuento.

lunes, 18 de noviembre de 2013

EL APARCAMIENTO




consejo
“El aparcamiento”

            Este verano como ya es habitual, lo he pasado en un pueblo de Castilla donde poseemos una  humilde casa como ya es sabido por todo mi entorno, ya que no es la primera vez que hago referencia a la misma. Y como he permanecido dos largos meses en el lugar, y al tiempo soy bastante observador de cuanto se mueve a mi alrededor, he tenido tiempo más que suficiente para  almacenar el máximo de información  sobre la vida y costumbres de sus ciudadanos, como  así de sus comportamientos para con sus mayores “La 3ª edad.” Que es como debemos de llamarlos, y  no los viejos como acostumbramos  hacerlo.

            Recuerdo años atrás, por las tardes solíamos reunirnos un grupo de mayores bastante numeroso a las afueras del pueblo, en los lugares que ya tienen elegidos de antemano, donde hablábamos y comentaban sus vivencias de su ya larga y agitada vida llena de experiencia y sabiduría. Como gozaba yo con sus historias al tiempo que contemplaba sus vivarachos ojos hundidos, como así su cara y manos arrugadas marcando la huella del pasado y duro trabajo en tiempos de su vida laboral, y como es natural, por el paso de los tiempos. Pero a pesar de sus años, achaques y dolencias, se les veía que eran felices y sobre todo, muy considerados en el seno familiar, al menos eso se intuía  en ellos, o yo lo veía así, pero no, la realidad es otra. La sociedad está  cambiando al tiempo que nos estamos endureciendo y volviéndonos todos un poco despreocupados, duros de corazón y bastante egoístas (por no decir otra cosa,) aunque no queramos reconocerlo. Esperemos que algún día ya no muy lejano en nuestro caminar hacia el futuro final de nuestros días, no tengamos que arrepentirnos de algunas de nuestras acciones, pero  creo sin error a equivocarme, que para  luego ya será demasiado  tarde.

            ¡¡Como cambian  las cosas con el paso de los años!! Ya este año faltan muchos de aquellas buenas gentes amigos de las tertulias veraniegas  con los que compartíamos charlas en las que nos empapábamos con su sabiduría, discursos, y recuerdos de las anécdotas  penurias y dificultades con las que tuvieron que luchar. En estos dos últimos años nos han abandonado Eloy, Esteban, Mariano y José, el grupo se va reduciendo (son varios más pero omito sus nombres por si alguien fuera de mi entorno y natural del lugar, pudiese tener acceso al presente escrito y pudiesen molestarse)  estos eran con los que más amistad compartía, para los que guardo  un sincero y profunde recuerdo.
             Aún quedan algunos de  la época, pero como digo la vida ha evolucionado demasiado en todos los aspectos,  ya no están allí con nosotros, los han retirado de la circulación, ya no se usa la buena costumbre de mantener a nuestros mayores en casa hasta el final de sus días, no, ahora los enviamos a un lugar llamado “Residencia” que no es otra cosa que un ¡Asilo! sucio y maloliente en la mayoría de los casos, o sea ¡Un aparcamiento! donde les dejamos aislados de todos sus seres queridos por los que tanto lucharon, apartados de su pueblo, sus vecinos, sus amistades y de sus gentes, ¿Qué les queda a estos abuelos? ¡Pues si les queda! Solo pensar y esperas en que llegue cuanto antes el momento de la despedida, el último adiós para siempre, el  viaje a la eternidad.  Pero eso sí, siempre lo hacemos por su bien, al menos es lo que solemos decirles, pero sin  pararnos un momento para pedirles parecer u opinión, ni darles la opción de poder elegir. La prueba de ello es, que uno de estos a los que me estoy refiriendo que le traen a casa algún fin de semana de higos a brevas….el pobre hombre ya no quiere venir, por que dice que luego le cuesta más tener que regresar de nuevo. Otros dos fueron a buscarlos para asistir a la boba de unos nietos, pero uno de ellos se negó, no quiso salir de su “Aparcamiento” tan solo para unos minutos y luego regresar de nuevo al alojamiento con más añoranzas que a la salida. Y como la cosa se ha convertido en moda….ya hay algunos más (Bastantes) que están esperando  que llegue el crítico momento para emprender el mismo camino, cuando les sea concedida la plaza que otro halla dejado libre, en la mal llamada residencia, para allí terminar sus días, al tiempo que sus descendientes puedan  libremente de ellos y repartirse la vianda.       

            ¡¡Señores ciudadanos, cristianos de los de golpes en  el pecho, de misa diaria y comunión todos los domingos!! ¿A caso alguien de Vds. puede decirme a que les suena la palabra de nuestros mayores?  Pues yo  sí, y se lo puedo explicar. Significa amor, cariño, inquietud, desvelos trabajo y sacrificio, que es todo lo que hemos recibido de ellos, o sea, la vida, para poder ser algo en la misma y llegar  hasta el punto en que nos encontramos gracias a su ilusión y compromiso  de paternidad ¿O acaso no es suficiente para recibir de nosotros otra clase de comportamiento, piedad, algo de cariño y ser un poco   más justo con los mismos? Pues no, al parecer no ha sido suficiente, pero la memoria de la vida es larga, Dios es justo, esperemos que  en el futuro no tengamos que lamentarnos y recibir la misma moneda de pago, ¡¡todo es posible en la viña del Señor!!


            Sin más por el momento y después de todo lo expuesto, de corazón  sobre el tema en el presente escrito, al tiempo que pido perdón si alguno de mis lectores pudiese sentirse molesto o identificado en el mismo, (nada más lejos de mi intención) puesto que yo solo hago escribir lo que veo y siento sobre el particular: viniéndome al recuerdo el antiguo refrán Castellano que aconseja y dice  que no es bueno ni se debe de escupir para arriba, puesto que lo más lógico es que le caiga a uno encima. No creo y espero, que ese no sea mi caso, por que si así fuese, creo que no sabría ni podría soportarlo, yo quisiera  estar  siempre cerca de los míos, y así poderme despedir de ellos en el último momento. Espero que Dios el todo poderoso, me conceda ese privilegio como es terminar mis últimos días de existencia, bajo la  atenta mirada de aquellos por los que tanto  he luchado, mis gentes.  

lunes, 17 de junio de 2013

El chorizo extremeño”
                        ¡¡Que tiempos aquellos!!  Aunque parece que fue ayer sí, pero la verdad es que ya han pasado un buen puñado de años, a pesar de que casi no nos hallamos  enterado, pero lo cierto es que  aunque en nuestras mentes permanezcan los recuerdo de por vida, el tiempo ha pasado por la misma a la velocidad del rayo. Pero bueno, dejemos  esto por el momento, y sigamos con el asunto que me ha movido para  escribir estas experiencias que no es otra cosa que dar a conocer (y al mismo tiempo hacer algo de propaganda de mi tierra) cuando llegaba la época de hacer la matanza de casa, que siempre se efectuaba (no se si por azar o por capricho) el  ocho de diciembre día de la Purísima  Concepción.
                       
            Después de los años trascurridos, como acuden a mi mente aquellos maravillosos tiempos, nos solíamos juntar parte de la familia, nosotros los pequeños a pasárnoslo bien durante los cuatro o cinco días que duraba dicho acontecimiento, degustando en especial  las magras de cerdo (Ibérico claro) a la brasa, y los mayores a trabajar picando carne y demás ingredientes necesarios, ya que había que preparar la vianda para todo un uño. Recuerdo que además del jamón, costillas tocino de papada y barriguera para los torreznos, se hacían chorizos, comineras, patateras, lomos, buches, lacones y morcillas de sangre y cebolla, o sea, lo que se dice toda clase de embutidos: que al conjunto de todo ello le llamábamos chacina. Sí, porque la palabra chorizo…. puede dar motivo a  posibles y desagradables confusiones, pero si decimos chacina ya es otra cosa, quiere decir que es auténtico manjar extremeño.

            Hasta aquí solo se conocía por su fama el chorizo (chacina) extremeño, el salmantino y como no, el chorizo Revilla (ya en segunda escala) y por si faltaba alguno el de “Cantinpalo” aunque este debió ser muy escurridizo (como los de ahora por que yo no recuerdo haberlos probado) y todos gozábamos de unos saludables y  exquisitos embutidos: pero hoy día no es lo mismo, desde hace unos años para acá la cosa ha cambiado totalmente por completo.
           
            ¡¡Pero que pasó!! Que desde que algunos especuladores amigos de feos y turbios negocios, atracadores con alevosía y nocturnidad, acostumbrados a vivir a toda costa de meter la mano en la hucha o mochila como os guste llamar, y sin doblar el espinazo (si espinazo por burros) en su vida, descubrieron que esto de fabricar chorizo era un chollo, se inventaron un más que sucio negocio y montaron en España nada más y nada menos que diecisiete Macro-empresas choriceras, que terminaron con los pequeños, humildes y honrados matarifes del pasado. Pero claro, estos indeseables solo fabrican chorizo de muy baja y sospechosa calidad, y a demás en cantidades astronómicas, poro que lo que se dice chorizos, chorizos… la verdad que si lo son en abundancia, pero demostrando carecer  de toda clase de honradez  y  vergüenza.
           
            Por no extenderme demasiado y no resultar pesado al respetable, solo reflejaré dos de las localidades donde se hallan ubicadas estas grandes y sospechosas empresas y el nombre de las mismas, por si algunos os dedicáis a regentar tiendas de ultramarinos u hoteles, para hacerles los pedidos choricero, y así poder disfrutar de interesantísimos descuentos, pero eso si, sin que en ningún momento perdáis de vista la cartera. Ciudad, Marbella, Supermercado “Malaya” gerente J. Gil (fallecido) adjunto J. Muñoz, el que pregonaba a bombo y platillo “los chorizos a la cárcel” y mira por donde. Valencia,  gerente F. Camps, adjunto, R. Costa, Mallorca Supermercado “Gurtel” gerente J. Mata, adjunto I. Urgandarín, un reconocido deportista, más que nada por el puesto que ocupa en la sociedad. Donde os recibirán  como principales dirigentes para haceros toda clase de descuentos siempre que ellos gocen de participar de buenos dividendos.  Yo estoy seguro que no tendré demasiados problemas con ellos, por que como buen extremeño y conocedor de la chacina, (no de los chorizos) cuando revise la chorizada como no me fío un pelo de ellos, si veo algo raro o no me guste su presencia, me fijaré en el código de barras, y si no comienza por EX, no me haré  cargo de dicha  mercancía.
           
            Y ahora después de todo lo expuesto en el presente escrito y a demás de estar hasta la médula de tanto tuerce botas atracadores y chorizos: perdonar por la  reincidencia, pero otra vez más tengo que recurrir a los refranes de mi abuela materna: decía así, “más vale lo malo conocido que lo bueno por conocer” por lo tanto, creo que  me quedo con el consejo, y como no, con mi extraordinario y natural chorizo extremeño…
                                                         El abuelo, 11/06/13


           


            
El chorizo extremeño”
                        ¡¡Que tiempos aquellos!!  Aunque parece que fue ayer sí, pero la verdad es que ya han pasado un buen puñado de años, a pesar de que casi no nos hallamos  enterado, pero lo cierto es que  aunque en nuestras mentes permanezcan los recuerdo de por vida, el tiempo ha pasado por la misma a la velocidad del rayo. Pero bueno, dejemos  esto por el momento, y sigamos con el asunto que me ha movido para  escribir estas experiencias que no es otra cosa que dar a conocer (y al mismo tiempo hacer algo de propaganda de mi tierra) cuando llegaba la época de hacer la matanza de casa, que siempre se efectuaba (no se si por azar o por capricho) el  ocho de diciembre día de la Purísima  Concepción.
                       
            Después de los años trascurridos, como acuden a mi mente aquellos maravillosos tiempos, nos solíamos juntar parte de la familia, nosotros los pequeños a pasárnoslo bien durante los cuatro o cinco días que duraba dicho acontecimiento, degustando en especial  las magras de cerdo (Ibérico claro) a la brasa, y los mayores a trabajar picando carne y demás ingredientes necesarios, ya que había que preparar la vianda para todo un uño. Recuerdo que además del jamón, costillas tocino de papada y barriguera para los torreznos, se hacían chorizos, comineras, patateras, lomos, buches, lacones y morcillas de sangre y cebolla, o sea, lo que se dice toda clase de embutidos: que al conjunto de todo ello le llamábamos chacina. Sí, porque la palabra chorizo…. puede dar motivo a  posibles y desagradables confusiones, pero si decimos chacina ya es otra cosa, quiere decir que es auténtico manjar extremeño.

            Hasta aquí solo se conocía por su fama el chorizo (chacina) extremeño, el salmantino y como no, el chorizo Revilla (ya en segunda escala) y por si faltaba alguno el de “Cantinpalo” aunque este debió ser muy escurridizo (como los de ahora por que yo no recuerdo haberlos probado) y todos gozábamos de unos saludables y  exquisitos embutidos: pero hoy día no es lo mismo, desde hace unos años para acá la cosa ha cambiado totalmente por completo.
           
            ¡¡Pero que pasó!! Que desde que algunos especuladores amigos de feos y turbios negocios, atracadores con alevosía y nocturnidad, acostumbrados a vivir a toda costa de meter la mano en la hucha o mochila como os guste llamar, y sin doblar el espinazo (si espinazo por burros) en su vida, descubrieron que esto de fabricar chorizo era un chollo, se inventaron un más que sucio negocio y montaron en España nada más y nada menos que diecisiete Macro-empresas choriceras, que terminaron con los pequeños, humildes y honrados matarifes del pasado. Pero claro, estos indeseables solo fabrican chorizo de muy baja y sospechosa calidad, y a demás en cantidades astronómicas, poro que lo que se dice chorizos, chorizos… la verdad que si lo son en abundancia, pero demostrando carecer  de toda clase de honradez  y  vergüenza.
           
            Por no extenderme demasiado y no resultar pesado al respetable, solo reflejaré dos de las localidades donde se hallan ubicadas estas grandes y sospechosas empresas y el nombre de las mismas, por si algunos os dedicáis a regentar tiendas de ultramarinos u hoteles, para hacerles los pedidos choricero, y así poder disfrutar de interesantísimos descuentos, pero eso si, sin que en ningún momento perdáis de vista la cartera. Ciudad, Marbella, Supermercado “Malaya” gerente J. Gil (fallecido) adjunto J. Muñoz, el que pregonaba a bombo y platillo “los chorizos a la cárcel” y mira por donde. Valencia,  gerente F. Camps, adjunto, R. Costa, Mallorca Supermercado “Gurtel” gerente J. Mata, adjunto I. Urgandarín, un reconocido deportista, más que nada por el puesto que ocupa en la sociedad. Donde os recibirán  como principales dirigentes para haceros toda clase de descuentos siempre que ellos gocen de participar de buenos dividendos.  Yo estoy seguro que no tendré demasiados problemas con ellos, por que como buen extremeño y conocedor de la chacina, (no de los chorizos) cuando revise la chorizada como no me fío un pelo de ellos, si veo algo raro o no me guste su presencia, me fijaré en el código de barras, y si no comienza por EX, no me haré  cargo de dicha  mercancía.
           
            Y ahora después de todo lo expuesto en el presente escrito y a demás de estar hasta la médula de tanto tuerce botas atracadores y chorizos: perdonar por la  reincidencia, pero otra vez más tengo que recurrir a los refranes de mi abuela materna: decía así, “más vale lo malo conocido que lo bueno por conocer” por lo tanto, creo que  me quedo con el consejo, y como no, con mi extraordinario y natural chorizo extremeño…
                                                         El abuelo, 11/06/13